Por primera vez en el blog escribo una reseña doble. No se si es algo que se suele hacer y espero no confundir a nadie. Creo que los dos libros que reseño aquí tienen puntos muy importantes en común así que no debería ser un problema. Para que no parezca un descuadre de lecturas con respecto a los Wrap Ups, ya aviso que leí 84, Charing Cross Road en enero y Letter to D en febrero.
Creo que esto no lo había mencionado todavía, pero soy una gran amante del teatro y de la correspondencia. Uno de mis libros favoritos de la infancia es Querida Susi, Querido Paul, de Christine Nöstlinger. Con eso lo digo todo. Es más, la libreta en la que apunto todos mis libros favoritos desde que se leer contiene bastantes títulos de estas dos modalidades =) Vaaale, me habéis convencido. En una próxima entrada os enseñaré cómo organizo esa libreta jajaja
¡Pues allá vamos!
· Título: Letter to D. A Love Story
· Autor: André Gorz
· Saga: libro único
· Año: 2009
· Editorial: Polity Press
· Páginas: 134
· Precio: 2,83€
· Traducido al español: Sí
· Título de la traducción: Carta a D. Historia de un amor
· Traductor: Jordi Terré
· Editorial: Booket
· Precio: 6,95€
· Título: 84, Charing Cross Road
· Título original: 84, Charing Cross Road
· Autor: Helene Hanff
· Saga: libro único
· Año: 2002
· Editorial: Anagrama
· Páginas: 126
· Precio: 10€
SINOPSIS DE LETTER TO D:
“Acabas de cumplir ochenta y dos años. Has encogido seis centímetros,
sólo pesas cuarenta y cinco kilos y sigues siendo bella, elegante y
deseable. Hace cincuenta y ocho años que vivimos juntos y te amo más que
nunca. Te escribo para comprender lo que he vivido, lo que hemos vivido
juntos.”
SINOPSIS DE 84, CHARING CROSS ROAD:
En octubre de 1949, Helene Hanff, una joven escritora desconocida, envía
una carta desde Nueva York a Marks & Co., la librería situada en el
84 de Charing Cross Road, en Londres. Apasionada,
extravagante y, muchas veces, sin un duro, Helene le reclama al
librero Frank Doel volúmenes casi inencontrables que
apaciguarán su insaciable sed de descubrimientos. Veinte años después
continúan escribiéndose, y la familiaridad se ha convertido en una
intimidad casi amorosa. Una pequeña joya que evoca el lugar
que ocupan en nuestra vida los libros... y las librerías.
RESEÑA:
Sinceramente, no entiendo cómo puede ser que estos libros no sean más conocidos en el territorio hispanohablante. Y dudo mucho que la culpa la tenga la edición, porque está muy cuidada en ambos títulos. Además, están muy bien de precio y son lecturas ligeras pero muy intensas. Si las has terminado en una tarde y te has quedado como si nada, quiere decir que no les has prestado la suficiente atención.
Tanto un libro como el otro son "biográficos", es decir, no son una biografía estrictamente dicha, pero a través de la correspondencia conocemos la vida de quien la escribe. Las vidas de André y Helène estuvieron ligadas a personas que los marcaron eternamente. André conoció a su mujer Dorine, quien se convirtió en su ¿musa? y mayor influyente. Antes de morir le escribió la carta que se publicó en forma de libro. Helene conoció a Frank a través de las cartas con las que le exigía títulos en buen estado. Ambos autores vivieron atormentados por su relación con estas personas; uno por mostrar a su público lector una imagen poco elegante de su enamorada, el otro por no tener suficiente dinero como para conocer en persona a su correspondiente antes de que le visitase la muerte.
En las siguientes líneas profundizo más en cada caso:
Por un lado tenemos a André Gorz, que es un ilustre filósofo, compañero de Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir. En el libro, escribe una carta unidireccional a su mujer poco antes de quitarse la vida. Dorine (o D.) es la destinataria y está en la fase terminal de la enfermedad que la ha apartado de la sociedad durante las últimas décadas de su existencia física.
En las siguientes líneas profundizo más en cada caso:
Por un lado tenemos a André Gorz, que es un ilustre filósofo, compañero de Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir. En el libro, escribe una carta unidireccional a su mujer poco antes de quitarse la vida. Dorine (o D.) es la destinataria y está en la fase terminal de la enfermedad que la ha apartado de la sociedad durante las últimas décadas de su existencia física.
En su carta, André hace un repaso a su vida desde que conoció a Dorine, porque antes de ella no existía la vida para él y tampoco la habría después. André conoció a Dorine en Lausanne, Suiza, lugar en el que él escapaba del nazismo y ella trabajaba temporalmente como actriz. Ambos eran personas cultivadas, y eso es algo que martirizó al filósofo, puesto que en su obra, la única imagen que se plasmaba de D era la de una bestia salvaje y analfabeta, cuando en realidad no era más que su gran fuente de inspiración y sabiduría. Por supuesto que André reconoce en su última carta que él siempre se amoldó al saber hacer y el modo de vida que ella prefería; prácticamente, se reconoce a sí mismo como a un calzonazos orgulloso de ser algo que en realidad era su esposa y no él. Ya sabéis que dicen que "detrás de un gran hombre hay siempre una gran mujer" ;)
Pero no nos pongamos melodramáticos. Como bien habéis leído antes, esta carta la escribió poco más de un año antes de suicidarse. La muerte de su esposa iba a suceder en cualquier momento y él no estaba dispuesto a hacerse cargo de sus restos mortales ni de sus recuerdos. Más bien, ninguno de los dos estaba dispuesto a tener recuerdos del otro, sólo querían realidad, así que formaron el pacto de dejar de vivir a la vez para no tener que soportar la tristeza. ¿Hay algo más romantico que eso? Y ahora me pregunto, ¿existe una mejor manera de celebrar el mes del romanticismo comercial que leyendo esta carta que nos remite al romanticismo real para toda la vida? Lo dudo.
Por el otro lado y después del gran inciso de André Gorz tenemos a Helene Hanff. 84, Charing Cross Road podría considerarse su primera obra, aunque en realidad no fue concebida como tal. Este libro contiene toda la correspondencia entre una joven escritora con poco dinero y en busca de los pilares de su oficio y una librería de segunda mano un tanto peculiar. Gracias a las idas y venidas de los sobres en dirección a Nueva York y Londres, conocemos a los dedicados trabajadores de Marks & Co. y a una descarada y desconfiada Helene que entrega su corazón por completo a unos empleados que, pese al racionamiento que castiga a sus familias, le ofrecen todo cuanto tienen.
Desde luego que este libro es una golosina para todos los amantes de los libros (y de los libros que hablan sobre libros), sin embargo, también debe tenerse en cuenta como un documento histórico. Tenemos muy poca obra publicada que refleje la dureza de los años 50 en Europa a través de otra historia principal. En el caso de la correspondencia, casi todo se guardaba y los formalismos estaban a la orden del día incluso entre compañeros de escupitajos. Con el paso del tiempo y gracias al aprecio de la sociedad actual por sus raíces nos están llegando textos antiguos que hasta ahora no tenían valor. Pero me juego la posesión del libro a que ninguno de ellos suena tan actual como éste.
En cuanto a la parte formal, ambos libros contienen un anexo posterior a la obra principal que orienta al lector en cuanto al antes y después de lo que tiene entre las manos. Creo que el mayor spoiler posible os lo haría contándoos esto (ya que en el resto de reseña no hay spoiler), así que dejaré en vuestras manos leer o no estos libros y averiguar qué ha sido de ellos. De los libros y de los autores, está claro.
Desde luego que este libro es una golosina para todos los amantes de los libros (y de los libros que hablan sobre libros), sin embargo, también debe tenerse en cuenta como un documento histórico. Tenemos muy poca obra publicada que refleje la dureza de los años 50 en Europa a través de otra historia principal. En el caso de la correspondencia, casi todo se guardaba y los formalismos estaban a la orden del día incluso entre compañeros de escupitajos. Con el paso del tiempo y gracias al aprecio de la sociedad actual por sus raíces nos están llegando textos antiguos que hasta ahora no tenían valor. Pero me juego la posesión del libro a que ninguno de ellos suena tan actual como éste.
En cuanto a la parte formal, ambos libros contienen un anexo posterior a la obra principal que orienta al lector en cuanto al antes y después de lo que tiene entre las manos. Creo que el mayor spoiler posible os lo haría contándoos esto (ya que en el resto de reseña no hay spoiler), así que dejaré en vuestras manos leer o no estos libros y averiguar qué ha sido de ellos. De los libros y de los autores, está claro.
Querida Susi, Querido Paul es un libro mítico jeje
ResponderEliminarCreo que ya te comenté que conocía 84, Charing Cross Road y que le tengo un cariño especial así que creo que no te vendrá de nuevo que te diga lo de acuerdo que estoy con lo que has dicho sobre él.
En cuanto al primero, no tenía ni idea de su existencia. Estoy segura que acabaré por leerlo algún día.
Yo le cogí un cariño increíble también. Me he sentido identificada en varios momentos y me ha parecido una historia real tan preciosa que es de cine. De hecho se hizo una adaptación cinematográfica. ¡Tengo que encontrarla!
EliminarSobre el otro, TIENES QUE leerlo. Sé que te gustará =)
Un abrazo
OH *____* Son dos historias que quiero leer desde hace mucho tiempo. Gracias por la reseña
ResponderEliminar¡Besos!
¡Pues no sé a qué esperas! Cuando los leas pensarás "¿por qué he tardado tanto en hincarles el diente?" jajaja
EliminarUn beso =)
Hola guapi :D
ResponderEliminarAntes que nada agradecerte por pasarte por mi blog, me ha dado alegría ver a una personita nueva :)
Yo estos libros no los conocía pero lo cierto es que me llama Letter to D, pinta bien.
Gracias por las reseñas :)
Un beso enorme
Jopes, de nada =) Me encanta encontrar blogs que no conocía jajaja
EliminarEstán muy muy bien. Hacía tiempo que no leía algo que me gustase tanto... Si lees Letter to D prepara el Kleenex jaja No es pasteloso en absoluto pero es una historia de amor real tan dura como bonita.
Gracias por pasarte =) ¡Otro besito para tí!